Profesionales del Área Sur de Córdoba reciben taller de reservorios y catéter

Cerca de medio centenar de profesionales de enfermería de atención primaria de todas las zonas básicas de salud del área han participado en esta formación.

Esta actividad formativa ha consistido en un taller sobre el manejo de reservorios y catéter venoso central de inserción periférica (PICC) y ha tenido muy buena respuesta por los asistentes, que han manifestado su gran utilidad, ya que cada vez son más los usuarios que portan estos dispositivos. El PICC, se trata de un abordaje intravenoso con notables beneficios para los pacientes que precisan de un tratamiento prolongado o basado en sustancias agresivas, como es el caso de la quimioterapia. Se inserta a través de una vena periférica del brazo, por encima de la flexura del codo, y permite obtener un acceso al sistema venoso central.

Entre otras ventajas, evita punciones múltiples y continuas para obtener acceso venoso y mantener el capital venoso del paciente; administra grandes volúmenes de medicación; administra nutrición parenteral y tratamiento prolongado intravenoso (de duración superior a seis días) y, en definitiva, mejora la calidad de vida de sus pacientes a través de la optimización de la accesibilidad de los cuidados de este dispositivo.

Para ello, el personal sanitario ha de ser capaz de realizar una valoración proactiva del paciente, teniendo en cuenta las características individuales del mismo, así como su capacidad de autocuidado. De esta manera, con el taller se ha facilitado que los profesionales de Enfermería de la zona den una asistencia integral a los usuarios con PICC y reservorios, evitando, que tengan que desplazarse innecesariamente a un centro hospitalario para la manipulación de estos dispositivos, con la consiguiente optimización de tiempo y recursos, elevando la cota de calidad y humanización de la asistencia.

Formación de este tipo, es fruto de la búsqueda de la mejora continua del área de Gestión Sanitaria Sur de Córdoba, en proporcionar un mejor apoyo a profesionales y pacientes para mejorar la accesibilidad y calidad en los cuidados, y en el caso de este aprendizaje, dar respuesta a las necesidades de mejora detectadas para disminuir el número de venopunciones, minimizar las posibles complicaciones y promover la autonomía del paciente, a la vez que desarrollan competencias avanzadas específicas en esta práctica.